Metro de Madrid, anochece y hace frío fuera.
Llego tarde, burla del destino.
Me espera con una sonrisa forzada.
¿Llevas paraguas?
Empieza a llover, no llevo bufanda.
¿Por qué siempre tienes las manos tan frías?
¿Por qué tienes que marcharte tan pronto?
Vinos y risas, decorado de un sin ti compartido.
Qué absurdo azar, qué sinsentido.
Quizá no era necesario este sucio paréntesis.
¿Volverás?
¿Vendrás a buscarme?
Extraños, ajenos,
nosotros.
domingo, 3 de febrero de 2013
Suscribirse a:
Enviar comentarios (Atom)
No hay comentarios:
Publicar un comentario